¿Y si Catalina de Salazar contara su vida con independencia, si nos dijera qué significó el encuentro con Miguel de Cervantes, el tiempo cómplice que compartieron, sus ausencias biográficas, sus éxitos literarios? ¿Y si además de ser la mujer de Cervantes se nos presentara «en primera persona», independiente, con sus dudas y con su universo personal? ¿Y si nos acercáramos a ella desde su propia luz y no desde la sombra? ¿Y si sus palabras estuvieran en documentos históricos y literarios? ¿Y si los espacios, las ciudades, las casas habitadas por Catalina de Salazar tuvieran palabras que eran suyas? El teatro convoca la memoria y la hace presencia, por eso este libro ha nacido como un monólogo teatral.