La Covid-19 nos ha mostrado lo vulnerables que somos cuando la naturaleza responde a los daños que le hacemos. Sin embargo, la amenaza que ha supuesto está en una escala muy inferior a la que representa el cambio climático. Lo que este trae consigo es la desertificación de grandes zonas, la pérdida de enormes extensiones de cultivos, la disminución del agua potable disponible, la subida del nivel del mar y unos huracanes cada vez más destructivos. Todo ello producirá importantes movimientos de población, tanto desplazamientos internos como migraciones. Este libro muestra la dimensión de los impactos climáticos y analiza en profundidad los desplazamientos y las migraciones climáticas que ya están produciéndose y las que pueden producirse en las próximas décadas. Un análisis que está hecho región por región, centrado en varias regiones de África, de Asia y de Latinoamérica. Además, el libro se adentra en el dilema sobre la consideración de refugiadas que han de tener las personas que huyen de los impactos climáticos, y formula propuestas, tanto para la lucha contra el cambio climático, como para la gestión de las migraciones.