A principios del siglo xvii, dos países se reparten la hegemonía mundial: España e Inglaterra. Enfrentadas sus monarquías durante décadas, sus nuevos reyes, Felipe III y Jacobo I, acuerdan firmar un tratado que ponga fin a las constantes luchas por ampliar territorios y por el dominio del mar. En la primavera de 1605, una delegación inglesa con más de 700 personas se desplaza a Valladolid, capital entonces del reino español, para firmar la paz. Una de las personas designadas para esa delegación fue William Shakespeare, aunque no sabemos si llegó a viajar. De haberlo hecho, justo en esa época, Miguel de Cervantes se había trasladado a vivir a Valladolid con su esposa, su hija y sus hermanas. Acababa de publicar el Quijote y empezaba a disfrutar de su éxito. ¿Es posible que estando los dos escritores en la ciudad nadie los presentara? ¿O, por el contrario, alguien lo hizo? Y de ser así, ¿qué ocurrió? Jesús Ruiz Mantilla reconstruye el que pudo ser el encuentro y la conversación entre dos de los más grandes escritores de todos los tiempos. La literatura, las dificultades inherentes al hecho de escribir, la relación con el poder político, la crítica o el público, las cuestiones económicas y familiares son algunos de los temas de los que pudieron hablar. Y así lo hacen en los magistrales diálogos que conforman este libro.