«En este libro reflexiono sobre cómo nos enseñaron las matemáticas y por qué alguno casi llega a odiarlas, bueno, alguno sin el “casi”. Quiero proponerte que rompamos el círculo vicioso de las matemáticas como asignatura maldita. Pretendo mostrar también los entresijos de la aritmética escolar: por qué tenemos diez dígitos, adónde me llevo la que me llevo cuando me la llevo y parte de las preciosas investigaciones y demostraciones visuales que podemos llevar a cabo cuando miramos las matemáticas con otros ojos. Quiero explicitar que hay unas matemáticas que tienen mucho más sentido y que pasan por pensar y tocar, también por jugar, construir y disfrutar, dudar, argumentar y volver a pensar».