Un 31 de enero de 1995 nací en Ourense. Acento gallego, con Galicia siempre en la boca. Soy una chica tímida que siempre lleva de viaje por donde va a sus mejillas sonrosadas. La relación más larga que he mantenido ha sido con mi flequillo, y no a cualquiera le dejo despeinármelo.
Siempre he preferido ser yo misma, sin máscaras de por medio. Desnudar mi mente sin pensar en el qué dirán. Dos años atrás, de madrugada, descubrí que necesitaba darles vida a esos pensamientos que no me dejaban dormir a través de la tinta y el papel. Escribir es, en cierto modo, sanar la herida, porque nunca se cerrará, siempre estará latente a la vuelta de cada esquina dispuesta a ahogarnos. Soy todo lo que lees. Soy lágrimas, risas, corazones rotos, orgasmos a medianoche, besos lentos… Todos tenemos una historia, y una pequeña parte de la mía está tras estas páginas. Aquí no encontrarás poesía, pero sí sentimientos. Ojalá te veas reflejado en algún renglón, porque estoy segura de que todos hemos pasado por lo mismo en una etapa de nuestras vidas.