Cadena perpetua. En 2007 los abogados de Charles Manson, condenado a cadena perpetua en la prisión estatal de Corcoran, California como convicto de inducción al asesinato en 1969 de Gary Hinman, Sharon Tate, Jay Sebring, Woytek Frykowski, Steve Earl Parent, Abigail Folger, Leno LaBianca, Rosemary LaBianca y Donald Shea, presentaron de manera oficial una petición de libertad condicional para su patrocinado. La respuesta, como en otros casos anteriores fue negativa. Y ello es producto de un hecho innegable: El nombre de Charles Manson, más de 40 años después de cometerse los crímenes y después del inmenso impacto mediático que produjo su juicio, sigue provocando pánico, desasosiego, terror... cuesta trabajo creerlo, pero un anciano de 75 años sigue siendo considerado uno de los hombres más peligrosos del mundo, al mismo tiempo que sigue ejerciendo un interés y una fascinación casi morbosas en los más diversos ámbitos: desde grupos de Rock como Marilyn Manson o Guns N´Roses a dibujantes de comic, cineastas, diseñadores... Charles Manson, un personaje que se ha convertido en un verdadero icono de la cultura popular norteamericana: camisetas, posters, documentales, canciones... Charles Manson, el asesino, el loco, el visionario, el profeta del Apocalipsis en forma de música de los Beatles, la pesadilla del estabilishment americano, el terror, la violencia, la muerte, el Anticristo... pocas veces en la historia contemporánea un hombre, proponiéndoselo o no, consiguió provocar en una sociedad como la norteamericana, a la que se la supone avanzada, moderna, culta, en cierto modo vanguardia del mundo occidental, un estado de psicosis colectiva y de paranoia sólo comparables a la que el personaje mismo en cuestión padecía y que evidentemente, de una forma u otra, contagió a todo un país. Esa historia, y todas sus ramificaciones, es la que se narra en este libro, uno de los pocos existentes en la bibliografía sobre Charles Manson en castellano a nivel internacional.