A través de quince rutas distribuidas por las tres provincias aragonesas, el autor nos guía por más de medio centenar de lugares en los que la magia, la tradición, las costumbres ancestrales y las leyendas se mantienen vivas a través de ermitas e iglesias, monumentos, santuarios prehistóricos, simas y manantiales. No es una guía de viajes al uso, sino un buen libro de compañía. Con él podrá descubrir enclaves mágicos, lugares de poder dormidos en el tiempo y fiestas populares de gran raigambre. Para no perderse, y visitar cada uno de los enclaves propuestos, el libro incluye explicaciones sobre cómo llegar, así como las coordenadas para guiarse por GPS. Buen viaje.