El Laocoonte de Lessing representa una de las obras capitales dentro de la Historia de las ideas estéticas de Occidente. Teniendo como antecedentes remotos a Aristóteles (Poética) y a Horacio (Epistola ad Pisones) y como antecedentes próximos las investigaciones sobre la belleza y el arte que tuvieron lugar en el ámbito alemán, francés y anglosajón durante los siglos XVII y XVIII, es un ensayo sobre los límites que las artes plásticas y la literatura deben imponerse en función de los medios de los que disponen, los " signos arbitrarios y sucesivos " de ésta frente a los " signos naturales y simultáneos " de aquéllas. Partiendo de una opinión de Winckelmann relativa al grupo escultórico alejandrino que da nombre al ensayo y enfrentándose con una pintoresca interpretación, vigente a lo largo de más de un milenio, de la frase de Horacio ut pictura poesis, Lessing va devanando una serie de reflexiones sobre el arte, la belleza y los objetos adecuados a las distintas bellas artes. La obra revela una extraordinaria agudeza por parte de su autor, su insaciable curiosidad, su carácter polifacético, su pasión por la dialéctica. Libro lleno de digresiones, con el encanto de lo incompleto y fragmentario, en él podrá encontrar el lector, por ejemplo, interesantes observaciones sobre la esencia de lo cómico, lo ridículo, lo repugnante... que llaman la atención por su extraordinaria finura y que se anticipan con mucho al tiempo en que fue escrito este ensayo.